Se construyó en 1912, para conmemorar al Emperador Meiji y la emperatriz Shoken tras la muerte del primero y en sus 700.000 metros cuadrados viven 120.000 árboles de 365 especies diferentes de árbol procedentes de todo Japón. Es un templo más bien sobrio y a pesar de su centritud no suele estar abarratado de visitas, incluso yo diría que pasa bastante desapercibido. Es por cierto, un lugar muy bueno para ver una boda tradicional japonesa, ya que en sus edificios suceden casi todos los fines de semana.
Cómo tantas otras víctimas de la guerra fue completamente destruido en los bombardeos de la segunda guerra mundial. Se volvió a reconstruir en el 1958 siguiendo las técnicas tradicionales y está formado basicamente de cobre y ciprés japonés aunque los enormes Toriis son de Taiwan.
Para conmemorar que ya lleva 50 años en pie (y esperemos que le queden muchos otros) se le iluminó durante un par de noches, llenándolo de color. Además de todo esto a su entrada se colocó un enorme muro lleno de farolillos de papel que iba cambiando con el tiempo y todo eso aderezado con un par de cañones de luz. Estamos de fiesta señores! 🙂
Fue una ocasión expléndida para cargarse el trípode a la espalda, contar con buena compañía y marcarse un photowalk nocturno precioso con un templo engalanado. 🙂
Vaaaargme er paaaayo. Qué gonita la del trahe de luse. Qué gonita!
Preciosos los farolillos
Tendrás que ir en noche vieja para que veas que tan desapercibido pasa jeje. 😉
Precioso tenía que estar… y el ambiente especial…
Aqui, mi family, se nos han saltado las lagrimas… escuchando el video que colgastes en el facebook.
Japogo, es que cuando se pone el traje de luces todo gana! 🙂 Que me lo digan a mi!!! 😛
Oria, pues sí. Una pena que no estén todos los días, porque mereció la pena. O lo mismo gustó tanto porque no está todos los días… ^__^
Saralu, tomo nota!!
Queseyo, pues sí, precioso y un poco llenito de gente… 🙂 jejeje
Figu, esos Guardiaaan!!! Valhallaaaaa!!!
Que hermoso lugar, y que hermosas fotos, felicidades!!!!!
Muchas gracias!!!