Y es que en este método de estudio que nos tienen los amigos ingleses, las ciudades universitarias como está se hayan divididos en dos instituciones diferentes. La universidad y los College. Un college viene a ser el hogar del estudiante, donde come duerme y también donde recibe clases. Pero no donde se examina. Para eso está la Universidad que es la que se encarga de revisar y evaluar el trabajo de los alumnos de los más de 40 colleges de Oxford.
Realmente el poder adentrarte en un college te muestra lo diferente que puede ser la vida estudiantil. Patios secretos. Jardines privados. Jardines ocultos. Entremezclas de pasillos. Capillas. Altares. Habitaciones. Torreones. Campos. Prados. Es impresionante.
Naturalmente no se puede visitar todo, ni todos. Además del interés turístico mucha gente hace su vida allí y por muy bonito que sea es necesario un poco de respeto e intimidad para con los estudiantes y mucho más en estas fechas de exámenes en los que se reduce un poco más las zonas visitables.
Vamos allá con el paseito virtual por unos pocos de ellos. Es fácil imaginarse cuanto de todo este tipo de modo de vida inglés se puede encontrar en las páginas de Harry Potter, pues aunque la autora no cursó aquí sus estudios, sino en Gales, lo cierto es que el modo de vida es bastante similar y también queda reflejado en sus libros. 🙂
Hablando de Harry Potter y de Hogwarts no podemos obviar el que quizás sea el más importante (o famoso al menos) de los colleges de Oxford. El Christ Church.
Precisamente este College fue utilizado para muchas de las tomas de Harry Potter, como las escaleras que dan al Hall, maravillosamente adornadas por una bóveda florida…
… o el mismísimo Hall, en el que se basa el comedor que aparecen las películas. (No me quedó claro si lo usaron y luego lo ampliaron digitalmente o si lo recrearon en estudio para poder rodar en él).
Es «sencillamente» espectacular. Aún se sigue usando para las comidas de los miembros del College y fue en este sitio donde Lewis Carroll, uno de sus estudiantes escribió el inefable y psicodélico Alicia en el país de las Maravillas (lo siento mucho, pero me ha parecido un libro infumable). Tanta es la fama del sitio con respecto a esta obra que incluso una vidriera ha sido decorada con los personajes del libro y se comentan que muchos de los adornos de la sala dieron lugar a los personajes y situaciones de la historia.
De hecho justitamente a la salida hay una tienda dedicada única y exclusivamente al mundo de la Maravillas y a su protagonista (que repelús, oiga).
Fundado en 1524 este College es el único del mundo que cuenta entre sus «instalaciones» con una catedral (la mayoría tienen capilla) que comenzó como una iglesia románica a la que le fueron añadiendo capillas, quedando como un curioso collage de todas ellas. Famosa además por las impresionantes vidrieras…
… y por un techo envidiable (lo de los techos es algo bastante recurrente en estos sitios, ya lo ireis viendo 😉 ).
Otro de los colleges más importantes es el New College, al que se llega a través de una caminito entre callejuelas y que fue el primero que se construyó a partir de un patio interior cuadrado (quadrangle) y tuvo por finalidad original el educar a más figuras clericales para suplir al gran número que habían perecido víctimas de la Peste.
Tiene un claustro que, como os podreis imaginar, es precioso…
… pero a mi me dejó boquiabierto el cuidado jardín, lleno de rosales en flor y con un cesped por el que solo pueden pisar los miembros del college delimitado por las murallas originales de Oxford (que el propio college tiene la obligación de cuidar).
Destaca también el Magdalene College, cuya torre abre la entrada a Oxford y que además tiene su propio parque con ciervos en libertad (!!) (aunque estaban un poco lejos para tener alguna foto decente, pero juro que es cierto).
Además (lógicamente) su propia capilla y jardines interiores, entre los que me pude divertir buscando algún detalle curioso (lo bueno de viajar sin prisas). 🙂
Y por último y sin ser un College no puedo dejar de reseñar la Biblioteca Bodleian, que si forma parte de los edificios de la Universidad y que tiene más de 190 km de libros. Una biblioteca construida para REIPUBLICAEQUE LITERATORUM. La república del conocimiento. Ni paises, ni religiones, ni banderas, ni nada más que para todo aquel que quiera aprender.
Lo forman varios edificios entre ellos el Radcliffe Camera: una extensión posterior de la biblioteca en la que solo los estudiantes pueden entrar y que al igual que toda sala de manuscritos (esto no lo sabía yo) sólo se puede entrar con lapiceros para que si por algún casual se marca algo en un libro se pueda borrar.
Y también la Divinity School, cuya entrada es otra de las joyas de Oxford (también usada en las pelis del joven mago como enfermería :))
Ligeramente no muy breve e intenso igualmente. Todo un mundo por descubrir, este Oxford. Aunque ya hay alguno (alguna mejor dicho) que ya ha empezado a trazar un plan maestro para acabar por allí, espero que a los demás os pique el gusanillo de si no estudiar, al menos perderse por sus calles. 🙂
Precioso me ha encantado el lugar. Me llama la atención que les dejen los manuscritos ya lo que normalmente sólo se dejan consultar facsímiles para preservar los originales. Si tienen muchos manuscritos seguro que aunque sólo entren los estudiantes el control y el número de objetos permitidos dentro será muy pequeño. Une memez las medidas de seguridad de los aeropuertos si las comparamos con las que usan en estos centros de culto con documentos valiosos.
Espectacular!!! Yo quiero esos campos verdes, jardines, barquitas,… (las capillas la verdad no me interesan, con verlas un dia suficiente). Por qué no habrá de eso en la uni que estudie? Seguro que tendría otro recuerdo…
La verdad es que ya te imaginas en ese hall de entrada, mirando hacia arriba viendo las escaleras de madera moverse de un lado a otro… una chulada, si señor!!!
(haciendo un inciso sobre las medidas de seguridad en los aeropuertos… buenooo, si dejan que desear!!!…. y si no que se lo digan al chico «tulipán»…. jajajaj)
Un biquiño, igna…lo de las fotos en tu línea… no dejas de sorprenderme
Genial…
La verdad, no me imaginaba Oxford así. Tendremos que darnos una vueltita por ahí…
hum….
Me alegro que os haya gustado el sitio. La verdad es que aunque el tiempo no acompañó demasiado es precioso.
Oria, no estoy seguro que los manuscritos estén al alcance de todo el mundo. Supongo que podrás pedirlos y tras algún control te los podrán dejar, pero no sé como funciona exactamente. Como además era época de exámenes tampoco dejaban al turisteo trastear mucho. Alguna visita guiada corta. 🙂
Pero vamos, que si podeis no dejeis de ir. 🙂
Y bueno, con respecto al Tulipan… pues ya casi que me he acostumbrado a que me soben en los aeropuertos. 🙂 Que remedio!!! (sigh)
Echaba de menos tus fotos… desde un ciber ais
besos!
P.D gracias por pasarte por el blog 😛
Pues aquí se te echaba de menos a tí. 🙂 Como va Paquito?
Suerte!!!
Mal… esta en la uvi total 🙁
Y con posibilidad de recuperación? O lo damos por perdido? Que dicen los análisis?
Nota para descolocados: Paquito es el ordenata de Belén. En proceso de restauración… más o menos
Joer que susto! Se me había cortado el rollo. Menos mal que lo has aclarado.
Sí, me parecía necesario aclararlo, porque Paquito todavía no es muy conocido por estos lugares. 🙂 jejeje…
Pues sí, muy chulo Oxford. Yo aún no he ido, pero por lo que veo se parece bastante a Cambridge.
Mi facultad de Londres no es así exactamente, pero también tiene su césped y sus enredaderas por la fachada principal y un edificio ultramoderno con flequillo despeinado (?). Tengo ganas de contar cómo es la vida universitaria en Inglaterra, porque es bastante distinta a la española… a ver cuándo puedo ponerme a ello (estoy en semicarapantallismo, horreur!).
Maligno, lo de la D-80 es porque me han dicho que es la que más se parece a mi réflex no digital.
Saludos
Es por el estilo de Cambridge, pero está última tiene un toque un poco más rural.
Deseando de ver tus comparaciones universitarias, a ver si coinciden con lo que me imagino. Jejeje.
Con respecto a la D80, pues bienvenida!!! A gozaaaar!!!
Todo llegará: mi informe de las aulas de la Pérfida, la D-80, tu funda sumergible, el final del carapantallismo al que he vuelto (¡¡¡aggg!!!) y hasta el Nautilus en el fondo del Támesis.
Esperaremos a la D80, a Nemo, a Miguel Strogoff y a Phileas Fogg tomando un té. Oh yes my darling!
Lo de tu archienemigo carapantalleitor lo deberías arreglar por lo sano. Nada de diplomacias.
No me provoques… que luego no hay quien pague el alquiler en libras :-((( y el muy asequible transporte de Londres y la baratisima comida de La Perfida…