Bajo esta frágil figura de unos 25 centímetros ya hay un cerebro, un corazón, una médula espinal y toda una serie de organos funcionando dentro de su pequeña piscina particular.

Sigo maravillandome del milagro de la vida, pero más cuando nos toca de cerca y ver a Chiara, mi amiga desde que eramos nanos, tan guapa con su barriguita la verdad es que me dejó encantado e impactado. A partes iguales. 🙂

Porque tanto ella como su marido, decidieron aprovechar el tiempo antes de que la vida les dé un giro radical (giro que otros no queremos ver ni por asomo, todo sea dicho) para darme una alegría y marcarse una visita a la ciudad londinense y a mí (aunque de rebote 😉 jajaja).


Desde aquí, desearles a los papis, que todo vaya bien, muchísima suerte en todo lo que se os viene encima, que no será poco. Y estoy desdeando ver a la pequeña Electra dando guerra (como salga como la madre… jurjur).

Por cierto, Electra, Elektra… como no me va a gustar el nombre!!! Me encantaaaaa!!! Donde lo habré oido yo antes!!! Esta niña promete!!! El tito Ignacio te va a regalar muchos comics. Dejaos de muñecas!!! jejejee!!!

Para Chiara e Iván. Muchísimos besos!!