Pues si que hay lagos en escocia…me acuerdo que en uno de los promeros post decías que al principio os sorprendían pero que después ya era: «ahh, otro lago…zzzz».. estando allí te lo creo, pero la verdad es que desde la distancia, aunque cuesta mucho diferenciarlos es como estar viendo los fuegos artificiales de ayer… «ooooohhhhhh…..que bonito!!!!»… jeje..
(aunque no tan espectavular como la que señala lorea… me encanta la última foto…)
A mi también me gusta mucho la última foto!! Aunque todo el atardecer fue espectacular y tenía al resto de los componentes de la furgo fritos, con un para aquí! para aquí! para aquí! jejeje…
Oria, sé lo que quieres decir con lo de quejarse y pedir las fotos, pero no era el caso con este grupo. Fueron pacientes y no se quejaron en ningún momento porque saben lo que yo disfruto con las fotos. El tenerles fritos venía más por mi conciencia que por ellos. 🙂
Lo del ridículo yo tampoco lo he entendido del todo bien.
Japogo, me parece que en este momento había unas cuantas bajas en la furgo, tras bajar del Ben Nevis, de hecho esta vez sólo salí yo para hacer las fotos, con el tobillo hinchado y los gemelos subidos. Todo un espectáculo. 😀
La primera es tan de postal, tan preciosa, que me dice menos. Al menos así en pequeño, ahora las veré en grande. La última foto, con las líneas de fuga me gusta más, y el letrero luminoso para darle toque peliculero. La que más me enrolla sin embargo es la tercera porque es fundamentalmente geométerica y hasta cierto punto simétrica. Y nunca pensé que de mi saldría una descripción semejante…
A mi me encanta el «toque peliculero» del cartel luminoso. De las demás, la verdad es que confieso qeu no me fije mucho ni en la geometría ni en la simetría, estaba ofuscado en sacar medianamente bien las nubes que se agolpaban en la colina… 🙂
Siento informar a los sinvergüenzas que aquí la presenta en rara al redondo. Soy de té con leche. En casa si hay azúcar con azúcar, en el curro con sacarina.
El atardecer precioso, para variar. Hubo tiempo para las fotos por el par de vueltas que dimos para llegar a la que fue nuestra grandiosa morada aquella noche.
Pregunta: el caseto del letrero estaba al lado del albergue y el «piano bar», no?
Yo por mi parte, lo presente en extraño al cuadrado, y siempre me ha sentado mal la cocacola sin compañía 🙂
Rachel, hablar pá ná es tontería. 🙂 De todas maneras tampoco había mucho que contar. Es sólo un momento del viaje que merecía la pena su propio hueco. 🙂
Pierre, si efestivamente. Al lado de la casa de la fiesta. 🙂
Oria, japogo, Pierre, para mi arroz con leche. Que tengo antojo.
Cuanta razón tenía usted cuando me dijo que aun quedaban atardeceres… La primera foto es preciosa.
Pues si que hay lagos en escocia…me acuerdo que en uno de los promeros post decías que al principio os sorprendían pero que después ya era: «ahh, otro lago…zzzz».. estando allí te lo creo, pero la verdad es que desde la distancia, aunque cuesta mucho diferenciarlos es como estar viendo los fuegos artificiales de ayer… «ooooohhhhhh…..que bonito!!!!»… jeje..
(aunque no tan espectavular como la que señala lorea… me encanta la última foto…)
A mi también me gusta mucho la última foto!! Aunque todo el atardecer fue espectacular y tenía al resto de los componentes de la furgo fritos, con un para aquí! para aquí! para aquí! jejeje…
Suele pasar, se cagan en ti mientras haces fotos y después te las piden. Lo que peor llevan es cuando se sienten ridículos.
Mosquis!
¿Estuve yo en ese mismo viaje?
Oria, ¿el café ha sido amargo o con azúcar? Que no pillo lo de la ridiculez… sácame de dudas, anda.
Oria, sé lo que quieres decir con lo de quejarse y pedir las fotos, pero no era el caso con este grupo. Fueron pacientes y no se quejaron en ningún momento porque saben lo que yo disfruto con las fotos. El tenerles fritos venía más por mi conciencia que por ellos. 🙂
Lo del ridículo yo tampoco lo he entendido del todo bien.
Japogo, me parece que en este momento había unas cuantas bajas en la furgo, tras bajar del Ben Nevis, de hecho esta vez sólo salí yo para hacer las fotos, con el tobillo hinchado y los gemelos subidos. Todo un espectáculo. 😀
La primera es tan de postal, tan preciosa, que me dice menos. Al menos así en pequeño, ahora las veré en grande. La última foto, con las líneas de fuga me gusta más, y el letrero luminoso para darle toque peliculero.
La que más me enrolla sin embargo es la tercera porque es fundamentalmente geométerica y hasta cierto punto simétrica.
Y nunca pensé que de mi saldría una descripción semejante…
A mi me encanta el «toque peliculero» del cartel luminoso. De las demás, la verdad es que confieso qeu no me fije mucho ni en la geometría ni en la simetría, estaba ofuscado en sacar medianamente bien las nubes que se agolpaban en la colina… 🙂
A mi me gustan más la primera y sobre todo la segunda 🙂
Me encanta que a cada uno os gusten unas diferentes!!! 🙂
Guapísimas las fotos!!!
La última es la que más me ha gustado! Aunque la penúltima transmite algo… no sé… todas están muy guapas!!! =0)
Siento informar a los sinvergüenzas que aquí la presenta en rara al redondo. Soy de té con leche. En casa si hay azúcar con azúcar, en el curro con sacarina.
El atardecer precioso, para variar. Hubo tiempo para las fotos por el par de vueltas que dimos para llegar a la que fue nuestra grandiosa morada aquella noche.
Pregunta: el caseto del letrero estaba al lado del albergue y el «piano bar», no?
Yo por mi parte, lo presente en extraño al cuadrado, y siempre me ha sentado mal la cocacola sin compañía 🙂
Dicen que una imagen vale mas que mil palabras…. Y en este post te has quedado mudo!!!! Estaras enfermo??? Algun tipo de afonia en el teclado??
Por muy de postal que sea…. Me quedo con la primera… Apuntala, que ya le encontraré hueco en las pocas paredes que me quedan por decorar…. jijijijiji
Besitos!!!!!
Ooooriaaaa!! Ahora sí que estoy perdido. Translate please!
PD: Viva la sinvergonzonería.
Anónimo, muchas gracias! 🙂
Rachel, hablar pá ná es tontería. 🙂 De todas maneras tampoco había mucho que contar. Es sólo un momento del viaje que merecía la pena su propio hueco. 🙂
Pierre, si efestivamente. Al lado de la casa de la fiesta. 🙂
Oria, japogo, Pierre, para mi arroz con leche. Que tengo antojo.
edit:
…aquí la presente es rara al redondo…
Como me preguntabas por qué le había echado al café…