No tenía a los moais a manos, pero si a un buen grupo de amigos que optaron por quedarse muy quietecitos y meterse en el papel de piedras milenarias. El reto que me habían propuesto los chicos de legatraveler, ganadores del concurso era imitar la foto en la que ellos mismos se replicaban a si mismo enfrente de los moais. Y por supuesto utilizar la función wifi de la cámara Sony para poder llevarla a cabo.

La verdad es que para una foto de estas, en las que te multiplicas por la foto, tiene mucho sentido utilizar la función wifi, porque desde el móvil puedes encuadrar la foto, saber donde te quieres poner y ver directamente como va a quedar en la cámara, además, puedes disparar directamente. En total tres fotos, en tres capas de PS en las que ya me aseguré de que no hubiera lineas que pudieran llevar a la confusión a la hora de mezclar las fotos. Es un truco muy sencillo, pero que da mucho juego.

De nuevo reiterar mi enhorabuena a los ganador y que esté disfrutando de su flamante mirrorless Sony DSC-HX60. 🙂