Aun faltaba un rato para que amaneciera en el lago Baringo, pero con la claridad de la mañana era suficiente para que la barca se moviera suavemente entre los árboles. Si. Entre los árboles. Las últimas y despiadadas lluvias, habían elevado la altura del lago unos cuantos metros dejando inundados los campamentos y hoteles cercanos.
Se salvaba lo que se podía cuando se podía. No apetecía mucho rondar las cabañas inundadas hasta el segundo piso, cuando por ahí rondaban ocultos en la nueva maleza hipopótamos y cocodrilos, entre otros. Así que mientras los campamentos veían reducidos su porción útil de espacio, los animales aprovechaban el nuevo terreno entre raíces y arbustos cubiertos por agua para ocultarse.
Comentaban las voces del lugar, que no se recordaba una subida de las aguas semejante, pero los locales no parecían tampoco demasiado preocupados al respecto. Ellos seguían moviéndose por encima de las aguas, navegando y buscando donde pescar al amanecer. Y mientras tanto las famosas orillas del lago, plagadas de hipopótamos habían desaparecido y con ellas los hipopótamos.
Nos faltarían los animales bajo el agua, que nos detectaban antes de que pudiéramos verlos, vislumbrando tan solo el último latigazo de una cola adinosauridada de algún cocodrilo, pero nos quedaban el principal atractivo del Baringo. Sus centenares de distintas aves (470 especies registradas hasta la fecha), lo que lo convierte en un maravilloso lugar para su observación.
Y mientras tanto, la barca seguía su suave zigzageo navegando entre troncos y el cielo se incendiaba de naranjas. El sol aparecía creando un lago dorado lleno de brillos, las águilas pescadoras empezaban a volar y los cormoranes extendían sus permeables alas y plumas para secarse. Martines pescadores, abejarucos, garzas, estorninos, alcaudones, tejedores…
Ni que decir tiene que un ojo tan poco entrenado como el mío solo alcanzaba a imaginar muchas de las especies que solo se percibían por el oído, pero aún así, donde quiera que miraras se podían ver aves. Tanto en mitad del lago (que por cierto tiene una isla que se llama Gibraltar) como entre la frondosa vegetación de las orillas.
Sorprendía ver a los pescadores sobre esas mal llamadas balsas, que apenas eran más grandes que una tabla de surf y donde se movían con una especie de palas en las manos. Si no fuera por los cocodrilos me habría parecido hasta divertido, pero no podía imaginarme moverme en esas cascaras de nuez con semejantes bichos cerca. Ellos en cambio no tenían problema alguno.
Los cocodrilos tienen tantos peces a su disposición en las aguas del lago que les dejan en paz y muchos no tienen problema en pescar metidos en el agua, con los cocodrilos dando vueltas por ahí. La supuesta amistad de los cocodrilos con los humanos es algo que no me atreví a comprobar.
Genitales azules y rojos. La naturaleza de risas.
El Baringo además tiene algo de misterioso. No en vano es un lago que se nutre de los ríos Molo, Perkerra y Ol Arabel así como del agua que cae de las colinas Mau y Tugen… pero no sale por ningún sitio. Se supone que se filtrará a través del subsuelo, pero también tiene una tasa de evaporación mucho mayor que la de lluvia lo que en cierto modo mantiene el equilibrio.
Hora de seguir el camino, recoger los bártulos y bajar hacia el Sur. El camión nos esperaba para llevarnos a dos de los puntos más interesantes de Kenia: Nakuru y el mítico Masai Mara y aunque estaba disfrutando de cada instante, no podía esperar por verlos.
Parte del Minubetrip por Kenia | Más info: Ratpanat
Tú no haces fotos, le haces el amor a la cámara…
Una delicia, como siempre, ver la vida a través de tu visor.
¡Nos vemos pronto!
🙂 jajaja… muchas gracias Antonio! Y si, a ver si es verdad que nos vemos pronto! Un abrazo!!
Precioso as usual, un abrazo 😀
¡Qué fotazas Igni! 🙂
Me encanta tu trabajo. Espero conocerte algún día personalmente.
Un abrazo desde Extremadura.
Víctor
cuanto talento..
Hermosas imágenes, como siempre.
Saludos!
Lau
Otra serie de imágenes impresionantes. Gracias por compartirlas con todos.
Maravillosas fotos. Gracias por hacerme recordar el maravilloso viaje.
https://www.youtube.com/watch?v=SxM-RuuIhOo